Felicito al juez de la Corte Superior del Condado de Los Ángeles, William C. Ryan, por su fallo reflexivo y decisivo al rechazar que se haga un nuevo juicio para Erik y Lyle Menéndez, quienes permanecen en prisión por los asesinatos de sus padres, José y Kitty Menéndez en 1989. Este fallo cierra otra puerta en la larga campaña de los hermanos para escapar de la responsabilidad por sus acciones.